Todo sobre los topes reductores de velocidad.
Un reductor de velocidad es un dispositivo que ayuda a reducir la velocidad de un vehículo en zonas residenciales. Esta clase de medidas disuasorias son queridas y apreciadas por muchas personas, además resultan muy fáciles y rápidas de instalar y quitar, en comparación con los reductores de velocidad elevados de hormigón o asfalto, estos de hule se instalan en apenas un par de horas, mientras que los convencionales tardan 2 días en colocarse. Por otro lado, se adaptan a cualquier tipo de carretera y resulta muy sencillos de mantener y reparar a diferencia de los de concreto.
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Las áreas donde se pueden instalar estas medidas de prevención.
Hay muchas áreas donde se pueden instalar estas unidades. Desde Hospitales, plazas de aparcamiento, zonas residenciales, zonas escolares, centros comerciales, zonas de trabajo en construcción, almacenes, residencias de ancianos, áreas de juego, cruces escolares, inmediaciones de parques infantiles, alrededor de las vías de acceso a colegios, etc.
Si bien se puede instalar en las zonas residenciales, esto no significa que uno debe instalarlos sin supervisión. Antes de la instalación, hay que pedir permiso al ayuntamiento, este delimitara la zona donde debe instalarse y asegurara su correcta percepción con señales verticales que informan de su proximidad y que se debe reducir la velocidad.
Los problemas de drenaje han sido uno de los principales problemas de la instalación de los reductores de velocidad, por suerte las unidades de hule, permiten el paso del agua y no estancan o encharcan las carreteras donde se encuentran instalados.
Si va a instalar reductores en áreas donde nieva durante largos periodos de tiempo, hay que recordar se dañan con facilidad; Por lo tanto, instalarlos de manera que se puedan desmontar fácilmente durante la limpieza de la nieve.
